Opis:
Atravesamos el pueblo de Capileira y continuamos por la pista que lleva a la sierra unos cuantos kilómetros, hasta desviarnos por el carril que sale a la izquierda y hay un cartel que te indica Central Hidroeléctrica. Curiosamente, solo había un coche aparcado; siempre hay muchos coches, aunque sea temprano. Comenzamos nuestra jornada andarina partiendo de los 1540m. De altitud desde la central. Enseguida cruzamos el puente y comenzamos a ascender por el sendero PR- A 36. Hay un cartel con un mapa justo donde comienza el camino de Herradura. Hay un kilómetro doscientos metros, llegamos al cruce de senderos, abandonamos el que nos lleva directamente al refugio de Poqueira y tomamos el que asciende dirección oeste. Pasamos junto a una era y zigzagueando llegamos al tubo que baja de la cámara de descarga. Subimos directamente por los raíles, por donde baja la vagoneta, junto al tubo. Llegamos a La Cámara de Descarga. Las vistas son estupendas sobre Los Tajos de Los Machos, todavía con grandes neveros y todas las laderas salpicadas de color amarillo y verde. Continuamos por el sendero que ahora llanea por encima de la acequia entubada. Bordeando loma Púa, el barranco de Poqueira queda a nuestra derecha y se puede ver bien. Más arriba se ven toda Las Terreras Azules, Loma Pelada y del Mulhacén, a esta solo le queda un tímido nevero. El sendero nos hace ascender para pasar junto unas grandes rocas con formaciones muy llamativas, a partir de aquí comienza a descender dirección a La Fuente de La Raja. Este lugar, aunque artificial, es idílico, con la fuente de La Raja al lado. Hicimos una parada de media hora para picar algo y refrescarnos los pies. Hasta aquí llevamos casi dos horas de ruta y 5,33 Km. recorridos. Subimos unos cien metros Loma Púa y giramos a la derecha para meternos en el río Veleta. Hay que subir una fuerte barranquera y nos vamos derechos al río. Aquí comienza la diversión, guardamos los bastones y trepamos el cauce arriba. El río trae mucha agua y se hace dificultoso, hay que cruzarlo en varias ocasiones. Siempre hay por donde trepar y seguir, hasta llegar al circo. Tajos del Tesoro, Tajos del Sabinal, a la izquierda, Veleta, Los Machos y por delante El Púlpito al frente, a la derecha Raspones de río Seco. Un Lugar idílico, donde más de trecientas vacas disfrutan del pasto y del agua. Esto no es una zona de paso habitual, quien viene por aquí son montañeros experimentados y no dejan basura. En todo el día solo pude ver, una lata oxidada y la heché en mi mochila. No es normal estar en una zona de tanta belleza y no ver humanos ni basura. ¡Quizás! Las seis o siete horas que hay de caminata, desde cualquier punto cercano donde dejar el coche tenga la culpa. Sin contar la vuelta, que sigue sin ser fácil. Una vez al pie del Púlpito, hay una piedra grande que tenemos como referencia. Por aquí pasa una senda sin señalizar y parece un paso de cabras, te sube a un trecho para alcanzar La Laguna de Las c cabras. ¡Siempre lo digo! Si llegas hasta esta laguna, piensa en no hacer el camino largo y cuenta con parar un buen rato. Este lugar no es normal, es el paraíso, los colores, el sonido y la naturaleza es real. Más de una hora se nos pasó rapidísimo, tumbados en la hierba y disfrutando del momento. Una cabra montesa se nos acercó a escasos metros, como con ganas de preguntarnos como sabíamos de ese sitio. Había que volver y decidimos darle un toque a la ruta de hoy y subimos a la cumbre del Púlpito 2979m. Hubo que hacer otra larga parada, las panorámicas no tienen precio. ¡Alguien dijo!! Vamos a ponernos serios tenemos que volver. Descendimos por la cara oeste y fue flipantes, cuatrocientos metros de desnivel casi en vertical. Muy chula la bajada y solo para personas acostumbradas a la alta montaña. Hay cortes con mucho patio y hay que ir zigzagueando buscando el trayecto menos peligroso. Una vez en el río intentamos no perder mucha altura, queremos pasar por una construcción en ruinas que vimos esta mañana. Fuimos bordeando Los Tajos del Tesoro y subimos por los Tajos del Sabinal, buscando un collado cerca del Peñón Colorado. Al pasar el collado, fuimos bordeando Los Tajos Colorados, hasta llegar a loma Púa. El ritmo de los pies era frenético, las pérdidas de tiempo hacían sospechar que se nos podría hacer de noche. Es una zona que conocemos y nos encontrábamos muy bien situados. Bajamos a saco rectos hasta La Cámara de Descarga. Para hacerlo diferente a esta mañana, ahora cogemos el sendero. Nos viene bien para que descansen las rodillas, ha sido un descenso fuerte y con un ritmo alegre. Vamos por zonas por donde pasamos esta mañana, pero el sol está bajo y las sombras son fuertes. Esto hace que todo sea diferente. Llegamos al cruce con el sendero al refugio de Poqueira 8:45h. (1730m.) 19.65 Km. Tiempo en movimiento 8.00h.